la primera palabrano mira a los ojos
sienten un árbol las piernas
y cuando poso para el rostro
hay tintes de tarde avergonzada
soy una carta entregada
déjame espacio en la jaula
de tu esternon
un hornero construyendo
fragancias para un imperio
de axones hablando de nosotros
en la segunda palabra
no hay saliva del otro
apenas,
solo el plano de una colmena
bebo el encuentro
no te pienso desvestida,
la cabeza esta llena de ramitas
para fuego
o trincheras
para la tercera palabra
aun no nos fuimos juntos
no se puede decir cama
solo aguardar por otra mesa
donde estar solos
para la cuarta palabra
somos tan enteros que quizás
ya no pensemos en poseer al otro.
















